El piloto de Movistar pasa al cuarto puesto de la general en La Molina.
Nairo Quintana en el frente de la escapada.
(Getty Images)
Otro día, otra etapa de la Volta a Catalunya y otro calentamiento detrás de la línea de meta para Nairo Quintana ( Movistar ) como la estrella colombiana reflexionó sobre su segunda casi falta en los Pirineos en 24 horas.
Quintana había montado consistentemente en el ascenso desigual de La Molina, manteniéndose allí con los otros favoritos. Pero, a diferencia de Vallter 2000, cuando pudo seguir el ataque principal de Egan Bernal, en esta ocasión, cuando Miguel Ángel López (Astana Pro Team) se fue, Quintana no pudo seguirlo.
Como sucedió en Vallter 2000, el compañero de equipo de Colombia, Alejandro Valverde, luchó nuevamente para mantenerse en contacto con el grupo principal y en esta ocasión, otro ciclista de Movistar, el ex ganador de París-Niza Marc Soler, luchó valientemente para mantenerse al margen en la escapada y luego intentarlo. - y fallar - para quedarse con López cuando el colombiano pasó el poder.
Mientras tanto, Quintana cruzó la línea en el sexto lugar, justo por detrás de Egan Bernal (Team Sky) y Adam Yates (Mitchelton-Scott), un resultado que le ha permitido ganar un lugar en GC, al cuarto lugar.
Aunque solo ocho segundos por detrás de Bernal, el podio provisional permanece fuera del alcance de Quintana, al menos por ahora.
Al final de una dura etapa, en la que siete corredores abandonaron y un octavo, William Clarke (Trek-Segafredo), terminó fuera del límite de tiempo, Quintana dijo a los reporteros que el ascenso final a La Molina "fue a todo gas, todos estábamos En serio, estaba tratando de mantenerme en los últimos ataques y, finalmente, pude hacerlo ".
De acuerdo con Quintana, el espectacular éxito del ataque de López se debió en parte a que el piloto de Astana extrajo la máxima ventaja posible desde el momento en que hubo una pausa en la batalla, con el resto de los principales contendientes de la GC mirándose entre sí muy de cerca, y luego consiguiendo atrapado como resultado.
"López atacó muy fuerte, iba muy rápido y aprovechó ese punto cuando el resto de nosotros nos mirábamos y funcionó muy bien para él".
En cuanto a la batalla general, Quintana, ganador de la Volta a Catalunya en 2016 y subcampeón en 2018, no tiró la toalla, aunque admitió que sería difícil intentar expulsar a su compatriota del liderazgo del GC.
"Es muy complicado. Las etapas de montaña han terminado y tendremos que ver qué sucede ahora. Tal vez si hay un poco de viento cruzado en la sexta etapa ...", cuando la carrera llega a la costa mediterránea, concluyó Quintana. Pero el colombiano, consciente de que esta carrera a menudo ha sido ganada y perdida por unos pocos segundos, no parecía demasiado optimista.
Fuente:www.cyclingnews.com
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por su opinión