Sin embargo, el Movistar reaccionó bien y pudo reincorporarse al pelotón. Entró con el codo ensangrentado. También Porte y Ciccone. Terpstra tuvo que abandonar.
As.com
El Movistar sabe que no hay día tranquilo. Y si el lunes pasado fue Mikel Landa el que perdió 2:09 tras ser empujado por Barguil en un momento de nerviosismo por los abanicos, este miércoles, a pesar del ritmo lento de la jornada, Nairo Quintana se llevó un buen susto. A 30 km de meta, cuando los equipos de los velocistas aceleran el paso del grupo, una montonera afectó al colombiano. Su equipo el Movistar, reaccionó dejando atrás a varios compañeros para ayudarle.
Al cruzar la línea de meta, el colombiano dio un mensaje de tranquilidad, está preparado para lo que viene. "La caída ha sido inevitable. Estoy bien y las piernas, también. El equipo se juntó rápidamente y junto con el equipo de Porte entramos rápidamente. Yo estoy bien y ahora me pondré hielo para desinflamar el codo que es donde me raspe. Mañana, sin problema", aseguró el colombiano, que no perdió tiempo, pero llegó con el codo ensangrentado al autobús.
También afectó la caída a Richie Porte y a Giulio Ciccone. El trabajo de Movistar y Trek posibilitó que lograran reincorporarse al pelotón sin problemas. A Ciccone también se le vio más perjudicado y se quedó atrás. Aunque el peor parado fue Niki Terpstra. El holandés del Direct Energie tuvo que dejar el Tour visiblemente dolorido. Por los gestos, se temía una fractura de clavícula.
Fuente:www.as.com
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